adelitasalas

CiƩrrame los ojos

¡Oh amor mío! Tú tan distante ya de mí,

Te pidió por favor me recuerdes en la luna de octubre,

Sé que nuestros cielos son tan lejanos,

Mas sin embargo puedo sentirte una y otra vez,

Tan cerca de mí, en mi sangre, espíritu y en cada paso.

Supe que emprendiste un nuevo camino, al igual que yo,

Pero sé muy bien que dentro de tu ser jamás viste florecer un amor como el nuestro,

Tan maravilloso, único e inocente.

 

¿Recuerdas aquellas flores?

Si las que nacían de mis manos,

Aún existen sorprendentemente,

Siento su perfume, nunca mueren.

 

Quisiera volver a aquel tiempo,

Aquel en que la vida se tornaba tan sencilla.

Días eternos de carnaval,

Mi primera oración de la mañana era agradecer tu presencia en mi vida.

Nuestras manos se unían en oración, siempre felices de estar juntos.

 

Aquella tarde que visitaste mi casa,

Ya no estaba allí, me fui lejos,

Por dentro llevaba mis sueños, quizá algo retorcidos

Pero los guarde en mi corazón.

 

Años han pasado ya, dos lustros para ser exactos

Y sé que nada ni nadie puede borrar las huellas que hay en nuestra piel,

Porque un amor tan eterno rebasa fronteras, tiempo y espacios.

 

Glorifico tu existencia en mi vida,

No te niego que he soñado y en un sueño

Vienes a mí, te acercas y me llevas contigo.

No te niego que he pensado que ese sueño es mi despedida a este universo.

Despierto y lloro ante tal temor de desaparecer terrenalmente

Y no haberme despedido de ti.