Pepe Pnca

107. RELATO

 

 

 

107. RELATO

 

 

 

MAÑANA SE LO DIRÉ

(AUTOR DESCONOCIDO)

 

 

 

Había una vez una hormiguita, era como toda buena hormiga, trabajadora y servicial. Se la pasaba acarreando hojas de día y de noche, casi no tenía tiempo para descansar.

Y así transcurría su vida, trabajando y trabajando. Un día fue a buscar comida a un estanque que estaba un poco lejos de su casa, y para su sorpresa al llegar al estanque vio como un botón de lirio se abría y de el surgía una hermosa y delicada florecita. Se acercó y le preguntó:

- ¿Hola, sabes? -hizo una pausa y siguió- eres muy bonita... quién eres? - Preguntó la hormiga.

- Soy un lirio. Gracias. Sabes eres muy simpático. ¿quién eres tu? - La florecita contestó.

- Soy una hormiga. Gracias también- Respondió la hormiga.

Durante todo ese día la hormiga y el lirio siguieron conversando, haciéndose grandes amigos.

Cuando iba a amanecer la hormiga regreso a su casa, no sin antes prometer al lirio que volvería al día siguiente. Mientras iba caminando a su casa, la hormiga descubrió que admiraba a su amiga, que la quería muchisímo y se dijo: \"Mañana le diré que me encanta su forma de ser\".

Mientras tanto el lirio al quedarse solo también se había quedado muy conmovida con la nueva y entrañable amistad que había logrado al conocer a la hormiga. De pronto el viento agito sus hojas y al quedarse nuevamente quieta la bella flor pensó: \"Me gusta la amistad de la hormiga, mañana cuando venga se lo diré\".

Pero al día siguiente la hormiga se dio cuenta de que no había trabajado nada el día anterior. Así que decidió quedarse a trabajar y se dijo:\"Mañana iré con el lirio; hoy no puedo, estoy demasiado ocupada, mañana le diré  además que lo extraño\".

Al día siguiente amaneció lloviendo y la hormiga no pudo salir de su casa y se dijo: \"Que mala suerte, hoy tampoco veré al lirio. Bueno no importa mañana le diré todo lo especial que es para mí\".

Y al tercer día la hormiguita despertó muy temprano y se fue al estanque, pero al llegar encontró al lirio en el suelo, ya sin vida. La lluvia y el viento habían destrozado su tallo. Entonces la hormiga pensó: \"Que tonta fuí, desperdicie demasiado tiempo, mi amigo se fue sin saber cuanto lo quería, en verdad me arrepiento\".

Y así fue como ambos nunca supieron lo importantes que eran. Por eso no esperemos el mañana para soñar y por ningún motivo dejemos de decirle a una persona que la amamos.