neosan

MUERTE

Muerte, Dulce muerte
De azúcar, de pan, de plata
Tan incomprendida eres
Por tantas almas pazguatas.

Tú tan linda, de negro vestida
Ya sea a plena luz del día
O en una noche sombría
Tú llegas de visita.

Más no desempacas
Pues solo tomas y te marchas
Tu pago, el alma, la vida
Por calmar cruel agonía.

Al sonar la cabalgata
De la muerte llegar
Anunciada por el ladrido del perro,
Que le escucho a lo lejos
Casquillos sobre el viento,
El pasto y el pavimento
Golpear con estruendo silencio,
Sin lengua ni garganta.

Entre cantos de humos violetas,
Flores marchitas llegas a la puerta
Aroma sollozando con la triste lluvia
Murmullos escuchando de quien fue en la vida.

No te reciben con júbilo, te miran con desprecio
Como si tú fueras la culpable de su desconsuelo
Tú que eres buena, calmas el dolor y las penas
De quien el tiempo ha terminado, y está agonizando.

Bella muerte con tu precioso vestido
Con tu guadaña afilada y lustrosa
Tomas y acompañas a las almas
En su travesía hasta las puertas del cielo.

Donde esta quien ha de juzgarles
Porque tu solo ordenes recibes
De quien ya tiene fecha su juicio
Dejando en la tierra solo cadáveres.

Tumbas llenas de huesos sin sonido
Solo escuchándose el silbido del viento
De corazones desahogándose
Cuando llega un nuevo visitante.

Aquel que se queda y ya no se marcha
Se le acondiciona su nueva morada
Oscuro, solo, frio y húmedo
Su último hogar de tierra, el sepulcro.

Lágrimas al polvo
Sangre al polvo
Huesos al polvo
Hasta que polvo sea todo.

Muerte, oh muerte, parca, óbito
Tanto miedo sienten al llamarte muerte
¿Que sería la vida sin tenerte?
¿Tendría algún sentido?

No hay amargura sin dulzura
No hay alegría sin tristeza
No hay luz sin oscuridad
No hay vida sin muerte…

< -- NeoSan -- >