Cecilio Navarro

En empatía con todos los Adrianes del mundo.

Tengo una espina clavada

que igual que una sabandija

se aferra con mis entrañas.

 

Tengo una pena muy grande

que arranca de mi garganta

lamentos por soleares.   

 

Pena de verte indefenso

con miedo a la incertidumbre,

al bicho y al tratamiento.

 

Pena por esos calvitos

que luchan contra el cangrejo

a base de radio y quimio.

 

¡Viva tus garras chaval!

que nada te tuerza el brazo

que tú, te vas a curar.  

 

Cecilio Navarro Pérez.   12/10/2016.