argantonio

Cuando el reloj no sirve

Era al final de la madrugada,

y me tiré a un abismo sin fondo,

yo, ante la parca no me escondo,

ni le tengo miedo a la nada.

 

Mientras iba cayendo gruté con alegría,

!Viva siempre la vida!

lo único que nadie olvida,

iba hundiéndome y nació un nuevo día.

 

¿Donde están los amores,

en el campo o en la ciudad,

suspirarán por alguien o algo?

 

¿Me esperan nuevos horrores,

serán la gloria o el infierno verdad?

lo cierto, es que no sé si entro o salgo.