Óscar García

191 noches

Ya no dormía igual, porque me pasaba la noche mirándote.

Admirando la tranquilidad con la que respirabas sobre mí.

Y así, grabando el golpeteo apaciguado de tu corazón en mi mente,

exploré los laberintos de tu cuerpo.

Descubrí parques de atracciones entre tu cintura y tú pecho,

lagos y senderos por los que perderme,

rodeaban tus piernas y subían por tu espalda desnuda.

Un incendio en tu nuca me deboraba y acorralaba junto a tu cuerpo.

Así pasé nuestras 191 noches.

Cartografiando cada milímetro de tu piel,

recordando cada vello de tu cuerpo.

Perdido en tu rincones más íntimos a los que me cedías tus restricciones.

Sintiéndote con un abrazo sin estacionamiento limitado.

Abarcando cada trocito de piel bajo mis manos.

Buscando excitar cada poro de tu cuerpo.

Recorriéndote cada recoveco con mis dedos.

Bajo mi piel estaba la tuya y no quise separarme jamás de ese envoltorio que cubría a la mujer más bella que tuve entre mis brazos.

La mujer que consiguió hacerme feliz con una sonrisa.

La mujer que logró completarme con un abrazo de diez minutos en silencio sobre el colchón de una pensión en la que hicimos el amor más verdadero.

La mujer que me lo dio todo.

 

- EsinB -