Liaazhny

Remolinos

 

Anoche abrí el armario,

Tu etérea imagen se hizo presente,

Tomé en mis manos las delicadas gasas,

Cerré los ojos, las acerqué a mi pecho,

Y me envolví locamente

En ese remolino vertiginoso,

Regresé en el tiempo

Pude percibirte, recordé tu aroma

Estabas aquí…

Me mirabas extasiado,

Jamás olvidaré esa hermosa sonrisa

Ni la felicidad que mostrabas al verme

Aun con mi rostro ruborizado

Y mi cuerpo temblando en un leve sofoco.

Una lágrima asoma y rueda silenciosamente

Por mis mejillas, justamente donde

Delicadamente rozabas tus labios.

Suspiro profundo,

Te aprisiono a mi pecho,

Muy cerca de mi corazón

Que late aceleradamente

En complicidad con mi cuerpo

Que enardece y llora por ti,

Un gemido se deja escapar

Seguido de tu nombre.