LeAnDro silencio es salud en soledad

Mi nombre es, NADIE…

 

Yo soy nadie, pero me llaman como mas les place, según todos no tengo vida propia y lo que me gusta es hacer dinero fácil, como si fuera tan fácil lo que hago para vivir, muchos me aman por momentos, mucha gente me odia, pero cuando la soledad me encuentra solo de una persona me acuerdo, esa persona por la que vivo y por la que muero, por la cual sueño sus sueños, lo sé , podría intentar ser otra persona pero así están las cosas primero fue la necesidad, segundo fue tenerlo todo, y tercero es el miedo a perderlo todo, no pude ver el daño que nos está causando, quizá fuel el engaño de la hermosa juventud, quizá mis ojos estaban puestos en el hambre de mi chiquillo y del frio que nos abrazaba en aquel entonces.
Pero ellos siempre saben cómo juzgarme, no lo tomen a mal, quizá si supieran en lo que estoy pensando cuando los demás lo están disfrutando no les agradaría tanto, pero es la necesidad la que brilla en nuestros puntos faltantes, y nos cruzan por las calles.
Me llaman nadie, me dicen como se lo quieran imaginar, sin pensar que tengo un nombre, sin importar que alguien me llama mamá, solo me tratan como un objeto al cual pueden usar y descartar al final. Muchos me aman de a ratos, muchas me odian por siempre, la mayoría de las veces lo hago por oficio y pocas veces lo hice por amor pero aprendí a dejar el corazón en casa a la hora de trabajar.
Me llaman nadie, me dicen puta, pero si a vos te gusta y la paga es justa, seré toda tuya por el resto de la noche, y al amanecer volveré a mi hogar para poner en la mesa y en su lugar un plato de comida y llenarme de regocijo al verlo disfrutar, rogando que no se entere nunca jamás, en lo que trabaja mamá.