Sergio quevedo

Asesino o templario

Me dijo llegarás lejos\" pero acabarás sólo\",

la ambición tiene un precio, tu mayor tesoro,

desafío mis logros pensando en otros,

regalando mi presente con los milagros que obro.

 

Agrio, cuando descubro labios varios con sabor a larios,

y no hay sed que calme a este sedentario,

vivo en mi sede y sigo en mis trece como un pasionario,

impulsado por su hambre de victoria y pasando de las vistas de este bonito balneario,

de este calvario,

donde la calma parió sucedáneos en mi cráneo,

y pensamientos expontáneos recorren rincones subterráneos,

canalizando me hacia otras visiones, ser o no ser, asesino o templario...