MANUAL DE UNA CONQUISTADORA EMPEDERNIDA
Quiero arrancarte del Corazon,
Pero soy triste victima de tus gemidos.
No puedo resistir tu gestos de miel,
Gobiernas el control de mis sentidos.
Es un pecado tanta Belleza,
Que uno perdona y olvida por instinto.
Me capturan tus palabras no dichas,
Tus desaires un veneno en vino tinto.
Cuando me miras asi,
Me insinuas e incitas mi placer.
Sensualidad que impregna,
Deseos fogosos ocupan todo mi ser.
Estas curvas tuyas siendo mias,
Ese lugarcito privado tuyo pero mas mio.
Uno toca cielo cuando mortal,
Cuando me albergas con un suspiro.
Pienso que las noches compartidas atormentan,
La conexión aligera cualquier distancia.
Nos une el carácter de juntos cabalgar,
La calidez que roba tesoros hechiza sin repugnancia.