Eber R. Guerrero

Que Fueses...

Yo quisiera que tú fueses la mujer

que me acompañe en mis caminos

 y me desvíe de otros,

quisiera que tú fueses la gota de rocío

que me acaricia la cara

y me despierta,

quisiera que tú fueses

el humo del café por la mañana

y su calor como abrazo,

que tú fueses el astro al que cada noche

le pido que te cuide,

que tú fueses menos mi utopía

y más mi realidad,

el viento que me susurra al oído

 palabras de consuelo,

que fueses tú conmigo y con nadie,

pero más conmigo.