Marah

Dondequiera que estés (Acrósticos)

Dondequiera que estés: en el trabajo

atado a las palmichas de una palma,

metido por completo en un atajo

en la iglesia que siempre noble ensalma:

 

Ámame aunque sintieras muy abajo

mi tono de canción…la fe del alma…

¡Oh, Felis de mis noches, cisne majo:

rogarte solamente da la calma.

 

Sé que zozobro si te vas muy lejos:

imagino una barca donde vienes

nemoroso, a besar mi primavera.

 

¡Fíjate que pretendo ungir los dejos:

inundar con tu aroma mis edenes,

no dejes que se pierdan miel y cera!

 

 

Felis: constelación del gato