Adrian Labansat

QUIZÁS POR ESO ME MIRAS AUSENTE

Vestido de ceniza cerraba los ojos para tocar la muerte

buscaba flores que me acompañaran,

me quitaría la piel para colgarla junto a las gabardinas,

el cráneo quedaría junto a los sombreros

en el cajón las últimas cartas, el testamento

narrando las muchas personas que fui

y que pretendieron defenderme,

he sido inventado y creado desde las mentiras

me han llevado de la mano los deberes

para representar el papel que tenía que actuar.

 

Me perdí para siempre en los teatros, las expectativas y los nombres

llore junto a los andenes buscándome

trate de encontrarme entre los otros sin nunca dar conmigo

fui apartado del rumbo de la existencia

amontonado entre lo anormal y los museos de lo exótico

revente los sueños a pedazos por no poder alcanzarlos

eran demasiado aéreos para el peso de mis tristezas,

no encontré por donde regresar después del tiempo

no tuve una casa y mi retoño se me soltó de las manos

no pude retenerle, era demasiada mi pobreza y mi locura

en cambio busque abrigo en otros cuerpos que colgué a mi espalda como bolsos

intentando guardar la ternura que no encontré en ninguna parte

trate de arrebatar el amor, exigirlo para que la soledad no me ahogara

para no quedarme a la intemperie lleno de miedo

mis instintos lo buscaron para sobrevivir a los odios

pero poco a poco me fui quedando ausente

llenando los días con respiraciones que amparan aun mi vida,

nadie podrá conocerme porque solo yo puedo sentirme a mí mismo,

cada una de mis palabras llevara por siempre mi propio misterio

hasta que me cunda la fiebre de mis ausencias y también me haya ido.