Hija del mar

Un viaje de ida y vuelta

Aunque sus fuerzas comenzaban a fallarle

y sus sentidos ralentizaban sus funciones,

sus emociones estaban a flor de piel...

 

Sentía una mezcla de gratitud por la vida disfrutada 

y el amor sin medida que experimentó y experimentaba,

sus ganas de superarse continuaban

a pesar de tener sus fuerzas mermadas,

el cariño y el consuelo de sus compañeros de viaje incondicionales le ayudaban...

 

\"Esta vida ha sido bella\"...

pensaba...

\"no me voy vacía sino llena,

no me voy para siempre,

volveré en otro cuerpo,

mi alma es imperecedera y eterna,

me iré despacio, 

pero vuelvo\"...