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FLORITA Y SU POLLO **LA PENA DE FLORITA** (CUENTO INFANTIL)

 

FLORITA Y SU POLLO

*LA PENA DE FLORITA*
(CUENTO INFANTIL)

...

Hoy Florita está apenada,
de tristeza está llorando,
su pollo la está mirando
sin entender nada, nada.

-¿Dime Florita qué fue?
Tu carita de azucena
me muestra una enorme pena,
y quiero saber porqué.

-Hice algo malo pollito
queriendo hacer algo bueno,
es por eso que me apeno.
¡Tengo el corazón contrito!

-Pues, yo no te creo nada.
Eres Florita, tan buena,
que ninguna pena ajena
se queda sin tu mirada.

-¿Sabes? mi linda mamita
sufre de gran desconsuelo.
El abuelo se fue al cielo
y ella está... como marchita...

Quise darle una alegría
abonando su rosal,
eso es causa de mi mal
y de esta gran pena mía.

-Florita, yo no te entiendo,
pües, si tú lo abonaste
con gran amor actüaste
¡Bello, estará luciendo!

-Eso es lo malo... ¡Se ha muerto!
mami, lo vio esta mañana,
su cara se puso grana
y tiene gran desconcierto...

No se explica que pasó.
Sé que decírselo debo,
mas pollito, no me atrevo
a decir que he sido yo.

-Pero florita, ¿¡qué hiciste!?
si tú tan sólo abonaste,
con mucho amor lo cuidaste.
Dime, ¡porqué estás tan triste!

-Yo, quise que floreciera
a la mañana siguiente,
y por ser tan impaciente
¡Le puse la caja entera!.

-¡Entera! ¡qué desatino!
¿¡Cómo se te ocurrió eso!?
mas no es un acto travieso
y su porqué yo adivino:

Como mamita sufría,
lo estaba pasando mal,
al florecer su rosal
tendría gran alegría.

-¡Cierto pollito, así es!
Mas cometí gran error,
y ahora tengo terror...
Dime, tú, ¿cómo lo ves?

-Veo mi linda nenita
que sigues siendo muy buena.
Deja de llorar de pena.
Le contaré a tu mamita.

Pollito corre a la casa
de su amiguita Florita,
y le cuenta a su mamita
la verdad de lo que pasa.

Florita, bajo una encina
espera muy asustada.
Si mamá sale enfadada
correrá hacía la colina.

Mas, mami sale llorando
y la mira con amor,
Florita hacia su calor
no corre, ¡se va volando!

Las dos se dan muchos besos
y se entre cruzan sus brazos,
de darse tantos abrazos
le duelen hasta los huesos.

Florita, -dijo mamita-
sé que tu intención fue buena,
por eso no tengas pena;
te quiero mucho nenita...

Mas aprende la lección:
debemos ser cuidadosos
si hacemos actos hermosos,
actuemos con reflexión.

Pollito mira la escena,
de contento da un saltito,
Florita le da un besito
y aquí se acabó su pena.