FLORITA Y SU POLLO
¡UN FANTASMA EN EL BOSQUE!
...
Florita ha propuesto hoy
a su pollo una aventura.
(¿Sabéis que es de Extremadura
y, que yo también lo soy?)
Bueno, os sigo contando,
después de este breve inciso
que he colado sin permiso.
Veamos que están hablando.
-Pollito, al bosque quiero
que vayamos a jugar,
para correr y brincar
por el llano y el otero.
-Bueno, tan sólo un ratito
y nunca solo me dejes,
que no quiero que te alejes
de mí, siquiera un poquito.
-No, no me voy a alejar
no te preocupes por eso.
¡Ay! pollito dame un beso,
¡Venga, vamos a cantar!
Y se van los dos cantando
y saltando tan contentos,
alegres sus sentimientos;
parecen que van volando.
Jugaron hasta agotarse
entre gritos y entre risas;
ahora les entran las prisas:
Es tarde y hay que marcharse.
El bosque está muy bonito
todo llenito de flores,
cantando los ruiseñores
y de pronto... ¡se oye un grito!.
-¡Pollito!, ¿¡ves lo que veo
detrás de ese gran arbusto!?
¡Ay, tengo miedo, qué susto!
Lo veo y no me lo creo.
-Yo no veo nada Florita...
¡Dime qué es lo que estás viendo!
porque mucho no te entiendo.
¡Dime que ves, amiguita!.
-Pollito te estoy diciendo
que algo que no sé qué es,
se mueve, ¿¡es que no lo ves!?
¡De miedo me estoy muriendo!.
Donde señala Florita
mira pollito y se pasma,
lo que ve es un fantasma
con su blanca sabanita.
Al pollo le están temblando
desde las plumas a el pico;
se siente tan chiquitico
ante esa \"cosa\" volando.
Ninguno sabe qué hacer
-ni Florita, ni su pollo-
para salir del embrollo,
y ya empieza a anochecer.
Mas Forita de repente
deja de estar asustada,
y hacia el fantasma enfadada
se dirige muy valiente.
-Pero, ¿¡dónde vas nenita!?
-dice llorando el pollito-
Se lo dice a puro grito.
No le hace caso Florita.
Ella camina deprisa
paso firme y decidido,
llega ante el \"aparecido\"
y se muere de la risa.
Pues, lo que les daba susto,
era tan sólo una bolsa
de plástico, muy hermosa,
Enredada en el arbusto.
Si os asustáis un montón
niños, comprobad primero
si el fantasma es verdadero
o es vuestra imaginación.
Está bien imaginar
pero sólo cosas bellas,
si son feas, ¡a por ellas!
No os dejéis asustar.
Florita es inteligente,
a sus miedo se enfrentó,
y el problema resolvió
siendo audaz, y muy valiente.
Pollito está muy contento
y también lo está Florita,
los dos vuelven a casita
y aquí, se acaba este cuento.