Leandro Rodríguez Linárez

Intitulado CCCLXX

¡Que camino!

La prenoche de cada mañana,

Botellas de vacíos apresurados,

A veces… cigarros que confiesan el alma.

Los ecos acompañantes,

Las aceras y su rigor mortis.

Calles que estallan paso a paso,

Los relámpagos secos,

Las tildes y acentos que cuelgan,

La insurrección sumisa de la luz,

La agónica agonía de lo vivo,

El miserable respeto del recuerdo.

¡Que camino!

La pasiva guerra de mi pecho,

Esta cárcel de libertad,

La evidencia de lo inexistente,

La flagrancia de lo omitido,

La indeseada brevedad eterna,

Esta maldita semántica silenciosa

Y este laberíntico espacio entre mi sombra y yo.

 

LRL

23-6-2016