Juan M. Gámez Ortiz

Entre el amor y el llanto

El amor es certero y claro,
como las gotas de rocío
que caen del cielo.

 

El dolor es disperso y oscuro,
como las ondas que dejan las gotas a su paso
y que, poco a poco, se van disipando.

 

Es por esto que,
como tras las gotas van las ondas,
tras el amor viene el llanto
por el dolor del recuerdo.