Bryah

La Ășltima

 

Rosaría la agresiva luz con que caminas sin temor,
pensando en la brisa donde tu voz se pierde.
Bebiendo veneno como si fuera vino amargo.
Me acabas con el sufrimiento de la noche.

 

Sostén mi mano y recógela con suavidad.
No olvidaré la delicadeza con la que tu cuerpo deja sombra al irse,
Baja la mirada de bella caricia, apuntándome en la boca.
Sonríes, bocanada  ligera, fría, más fría.

 

Nos dirigimos a un cruel final callados.
Culpable del beso ausente,
muy lejos del cautivo amor,
hasta la última noche.

 

-Astrómetra