Se escucha un fuerte canto,
que viene de arriba el rìo,
tienen el alegre encanto,
de los pàjaros haciendo nido.
En el monte se arremolinan,
los animales pa escucharlos,
son los jangaderos,
que madera vienen arriando.
Por el ancho Paranà,
ellos estàn trabajando,
duro trabajo que tienen,
sin embargo siguen cantando.
Han talado unos montes,
los troncos hay que llevar,
y sin que el cansancio los venza,
rio abajo, hasta la Capital.
Llegan los jangaderos,
todos escuchan atentos,
es que la ciudad no sabe,
que se puede trabajar contento.
Y ellos bajan los troncos,
con que se van a fabricar,
esos muebles que usamos,
por toda la ciudad.
Un trabajo de corazòn,
puede hacerse con mucho amor.
Maria Hodunok.