anbel

Vida

No creo en las vidas idílicas

tampoco en las de película

pero sí en el día a día

con sus obstáculos y zancadillas,

con sus momentos buenos  con sus alegrías

que lo compensan todo alejando las desdichas.

Y así van transcurriendo poco a poco

y  a la vez muy deprisa y sin darnos cuenta

van pasando los años…

y con ellos vamos evolucionando

porque la vida nos va modelando

y aunque rebeldes nos volvamos

ella nos coge de la mano

nos regaña y al mismo tiempo

nos va mimando…

¡vida no me quieras tanto!

le digo suspirando

dame un respiro de vez en cuando

y ella sigue y sigue…

siempre empujando

un día tras otro

ella siempre mandando.

¡Vida para un rato quieta!

y no me incordies tanto

que estoy cansada de tanto trabajo.

¡Mira que eres inquieta!

me asustas y me asombras

contigo no me aburro nunca…

ni de día ni de noche te alejas

siempre me estás acompañando

y aunque me quejo más de la cuenta

¡Vida, no te alejes de mi lado!

siempre te estaré agradecida

por todo lo que me has dado.