juan sarmiento buelvas

AMORES ADOLESCENTES.

 

Salimos de la fiesta entre estribillos y canciones,

extraña noche en que la luna se dejaba seducir por el desvelo  de los enamorados

mientras  la  madrugada comenzaba a dormir sentimientos

despiertos.

Solo quería quedarme en tus pupilas  antes que el sueño sedujera

tu mirada,

la sangre mezclada con el vino de tus venas te hacía mas bella,

mientras mis pensamientos abrazaban la candidez de

tu inocencia.

Tus ojos se confundían con el destello de las estrellas en

el firmamento,

pero tu sonrisa no era fingida aunque tu memoria

desvariara,

porque tu loco y desnudo corazón seguía latiendo,

como laten  los  corazones de los enamorados.

Quería declamar en tu sonrisa  hasta hacerte delirar

de amor,

pero en medio de miedos e ilusiones,

pensamientos me inspiraban

y sensaciones me descontrolaban,

mis sentimientos escondidos ya no resistían

la tentación al deseo de tu piel.

Quería besarte y sentir el frío que te producía

la madrugada gélida

Quería abrazar tu cuerpo frío por la madrugada gélida

Para que sintieras mi cuerpo febril en tu piel,

y nos sorprendió la aurora en el jardín de tu casa,

y solo un beso tuyo en la mejilla al amparo de miradas

inquisidoras

nos anunció el final de esta inmortal aventura

de amor