Julieta Love

Anhelo

Sutil efervescencia tenerte,

a milímetros incalculables,

susceptibles a cada deseo,

testigos mudos de un lenguaje nuevo.

 

Es odioso el reloj 

que me condena a tener

y no tener

tu exquisito pestañeo,

que me esclaviza.

Me condena.

 

¡Ay amor!

Ojalá se marchiten los centímetros,

y se desvanezca el tiempo,

para entonces

poder conjugarte eternamente.