Mauro Enrique Lopez Z.

Tu partida

A buena hora me dejaste

porque querìa saber si esta pena

que llevaba dentro

era porque te ibas.

Como me rìo de extrañarte,

ni el perro que cuidaba lo hace

porque amanece y me despierta

con su aullido.

Como me cuida desde que me dejaste

yo sigo siempre alegre

hasta mi humilde corazòn.