ramirez y anguita

¡No, no me reproches!

 

 

¡No, no me reproches,

porque te ofrezco amor!

Deja que el tiempo,

indiferente, me reprehenda,

en el amor que pasa,

que sólo se queda presente

en la memoria del dolor.

 

Hoy me marcho y me valoro,

más que cualquier tesoro,

porque siempre soy fiel

a lo que siento.

Un día, en mi camino,

me acordaré de ti,

¡seguro que más triste!

sólo porque me perdiste

¡y no porque yo te perdí!…