Santiago Miranda

Día de campo  

 

I Tren

 

Mi vida es: recorrer los caminos

Pasajero soy del tiempo

Vigilante de campos y conejos

Mi abrigo, entorchado a tu cuerpo

Frente a tu recuerdo

¡Desnudo!

Tachonado de estrellas moribundas

El tren nocturno resuena

Un discurso pleno..

Pablo lo dijo

“el infinito como dos líneas paralelas”

 

 

II Mercado

 

Ahí me esperan: los frutos pródigos

del bosque claro en lo oscuro

su carne es veta intocable

tala ya mi corazón en sus dos partes

 

La mora quieta, el hijo sin nombre

en la fértil tierra, escuela

de sabios y prófugos libertarios

no todo se vende este pueblo

los injertos crecerán tras lo muerto

ya Pablo lo dijo

“aunque corten todas las rosas”

Tu tumba ya estará floreada de mi pensamiento

 

 

III Palafitos

 

La cabaña en el claro del bosque

“Morada del que lo terrestre”

se engalarán al nacer la estre

ya roja, los recuerdos de niño

de mis antepasados hilo

la bandera de hoz, tejido

todo un píis en vela

luces sobre sábanas que proyectan

nuestras ilusiones, luego sueños

 

La paila y ella tortilla

de crustáceos amputados

cerámica para el ensamblado

en sus partes: el todo

(madera labrada

la ventana y la silla

la guitarra descuadrada;


marcos del mundo real de los sueños)

 

Silva del tren a lo lejos

el cartero y la encomienda pasada

todo llega fuera de tiempo

todo llega aún demasiado antes

 

Cada curso es mandato divino

Y mi amor está acá conmigo

fuera de los asfixiantes espacios

y el tiempo decadente

que muere pero no muere

conmigo y contigo

 

Aquí respiro, aire, que respiro

Así todo llega desde fuera del tiempo mismo

letra funesta, un despido

mi traje viejo y me preparo

hacia el interior

hacia el interior de lo ido

 

IV La playa

 

Si te vas ya retornas

Eres un eco del silencio

Amor, mi cera no ensordece

Estos huecos en la arcilla de mi cuerpo

 

Prefiero lamer la cordura de tus dedos

Y dejarme llevar por tus sirenas amantes

mística de guerra y desastre

Día martes; Ablaciones en tu arena

Eres toda mojada de pasiones

 

Mar, si fueras tierra…

Ya verías que la ascendencia es sólo

repetir, los mismos pasos trepidantes

 

Pero bulles y bramas fiera

Nos mantienes pernoctando las palabras

Y la luna enfermera que acompaña

Sin involucrarse las tristezas de un mañana

 S o l i t a r i o

bien lejos cada uno del otro uno, resto

 

Cuando te tendré

Para luego verte ido

 

 

V El retorno

 

La cuesta volcada

Cazadores en la tormenta

Todo asfalto es desierto

Todo desierto arde en fiebre

Prepara las maletas;

Abriendo y arrojando todo

Ya no importa, en la vuelta

Nada más que lo quedado atrás

Atrás, atrás, mi destino es

Revolverme inconstante

Retardar lo paulatino

Mi destino es quedarme

Pero volviendo allá lo digo;

 

¿ Cuando te tendré

Para luego haberme ido?

hacia el interior, hacia

mi traje viejo y me preparo

a lo que llega demasiado antes

Y mi amor está aquí conmigo

fuera de los espacios asfixiantes

tala ya mi corazón en sus dos partes

su carne es veta intocable

a fuerza de amantes y delirios

del tiempo Pasajero, vigilante.