Murialdo Chicaiza

BOTE GRIS

 

Un abandonado bote
encallado a la orilla del lago
es mi corazón en silencio
entre latidos que han olvidado el ritmo
y el olor de aguas violentas.

Y no sé dónde olvidé los remos
como inútiles brazos de madera
ahogados en las frías aguas
bote que embarcamos para
mirarnos frente a frente
para avanzar por la soledad del lago.

Nada tiene color desde que partiste
el cielo solo es un rezago de grises
que se reparten entre nubes
y perfiles de lejanas montañas.