Raiza N. Jiménez E.

La luz en el amor.-

 

El amor real, es como una estrella brillante…

Brilla y en los momentos de oscuridad y se ve.

Pero está allí  siempre titilando aunque no la

puedas ver porque la luz del sol compite y la

tapa con su fulgor y llena de misterio su estar.

 

Nada es más hermoso que ver nuevamente el

arribar de su luz, regresar de su preciso reposo.

Así es el amor, se nutre de trechos y recesos

necesarios, para luego reaparecer con alegrías.

Si las distancias se alargan deviene la oscuridad.

 

Evitar será preciso largas separaciones que alejen

del corazón y de las pupilas la presencia de la luz.

El amor deja sus huellas, cuando se camina en el

cielo de las almas abiertas, que portan dentro de sí,

los efluvios que van dejando su magia en el ser…

 

Para ser, el amor, necesita de manifestaciones

inequívocas y palpables de los dos que se aman.

En el amor todo está lleno de las ilusiones de los

amantes, que en lazo atemporal se hacen uno.

El amor no es posible sin la unión de las almas.

 

¡Sabes que estás amando cuando todo  lo que

sientes y respiras, lleva el nombre de ese otro!

 

Raiza N. Jiménez/10/10/2015