El Corbán

TUS OJOS

Déjame mirarte a los ojos y veré mi alegría,

Pues no existe abismo más delicioso que tus pupilas

No hay deseo más fuerte que tu mirar

Ni reflejo más aterrador que verme en ellos,

Pues cuando pienso en el espejo de tus ojos

También soy atacado por el miedo de tu partida

Cuando al verme en ellos no encuentre vida.

 

Vida mía, perdona si mi egoísmo

Me hace pensar solo en mí mismo,

Y deseo, en mi razonamiento bruto, que no te vallas primera

Porque el pensamiento de tu ausencia el dolor en mi alma aglomera,

Luego, el corazón se me estremece de pensar en tus sufrimientos

Reacciono, agradezco a Dios por tenerte, y borro tales sentimientos

 

Tus ojos, oh Natalia, mi Naty,

Capaces de cambiarme el ánimo y humor

Capaces son, de mantenerme en estupor,

Ojos enigmáticos

Ojos mágicos,

Son, ante todo, mi delicia

Llenos de compasión y justicia.

 

Por eso mi alma te pide esos ojos que me torturan

Pero que, al mismo tiempo, mis heridas sanan y curan.

 

¡Por amor de Dios te pido!

Cumple estos, mis antojos

Y déjame disfrutar de tus ojos.