David Silvestre

Supervivencia


Allí donde los desiertos se vuelen por siempre
y las luciérnagas iluminen el sendero de sombras,
allí donde el mar nos devuelva los quizases
de quienes se fueron sin saber volver,
allí donde los delfines traduzcan los versos
y nacer no sea un castigo...

...podréis encontrar mi voz invitando al amor.

Pero aquí, en esta cárcel llamada urbe, ¡no!

No invitaré al amor, pues amar sería
una mera forma de supervivencia.