Cristian Roch

El duende y la conciencia.

Yo: -Duende, tengo miedo… (Exclamo tímidamente en silencio).

Duende -¿A qué temes…? (Pregunta sin palabras).

Yo: -A la vida. (Respondo firmemente).

Duende: -¿Por qué a la “vida”? Ella te lo da todo…

Yo: -Pero también te lo quita…

Duende: -No te lo quita, cumple con su misión… (Intentando tranquilizarme).

Yo: -Entonces, ¿por qué me castiga?

Duende: -Te castiga… ¿O te autocastigas?

Yo: …. (No sé qué decir).

Duende: -Piénsalo bien, si te autocastigas quizá no sea la “vida”, sino tu CONCIENCIA. (Concluye de forma implacable).

 

                                                Cristian D.