Aurita

Ira

La hoguera viva en tu mente,

implosiono subita y repentinamente

con la amarga llamarada ardiente, 

que brotó en un instante de mi ser...

 

Sin piedad, lanzas ardientes y venenosas,

salieron de tu boca, develando la serpiente

oculta que dormitaba en ti...

 

Esto fué el apocalipsis del mas intenso amor

que quiso ser y murió en el intento...

 

Diluiste mi amor, lo desintegraste,

quedó en el limbo, en el vacío en la nada...

desmembrado, chamuscado, 

plenamente fundido...

 

Estarás lejos, demasiado lejos...

logrará solidificarse otra vez...

veras algun día que,

de los peores desastres,

surgen hermosas, esbeltas

y grandes fortalezas...