el inspirado

En la inmensidad de mi pensamiento (1)

Estás en mi mente a toda hora,

te aferras a mis recuerdos 

como un alma herida a la orilla 

de un mar convulso...

No quieres morir... ¡No!

Yo soy quien no quiere dejarte ir,

quien no quiere perderte

entre las brumas del olvido.

Sueño con tus besos,

imagino tus caricias...

Pero sé que no son reales,

son ficticias y debo dejarlas ir...

Creo escuchar tu voz,

creo ver tus sonrisas

en los rayos de luz 

que hieren mi soledad...

Pero solo me engaño,

sé que son ficticias y debo dejarlas ir....

Te has ido, es verdad,

pero aún reinas en mi mente 

todas las noches y días,

como si tu ausencia no fuera cierta,

como si el adiós nunca 

hubiera nacido en tus labios...

Quiero olvidarte, pero cada día que pasa

eres más bella, más pura,

más brillante, más sólida

en la inmensidad de mi pensamiento.