¿Romper un corazón? ¡Que fácil es!
¿Y dejarlo huérfano de sus sentidos?
¿desacelerar sus latidos? ¡También!
duele acabar con los largos suspiros,
¡Pobre corazón! ¿El que nos haría?
y de improviso merecer un castigo.
¡Bien! Juntos vamos a romperlo ¡ya!
tu me das bien duro un, ¡No te amo!
yo te regreso un, ¡No te quiero más!
al instante a librarnos de la pesadilla,
y los pedazos rotos por aquí rodarán,
¡Fallaste corazón¡ olvidaste como amar.
¡Ay al fin! libres de la deliciosa prisión,
fuera cárcel, sin las cadenas del dolor,
donde atacan furiosas dudas de amor,
se retuercen vivos, celos tormentosos,
en amaneceres fríos de tibios alientos,
y de adioses al saborear dulces besos.
¡Emociones! llevaré a las profundidades,
junto al destrozado y maltrecho corazón,
cuando penas y nostalgias de la sinrazón,
paseen los vientos grises inviernos sin ti,
entre neuralgia, y las espadas atrapadas.
Pero, si naciste sin corazón en el pecho,
tu no tienes la culpa de ser así, ¡traidor!
¡Pobre corazón roto! en un nuevo amor...
¡Volverás a resucitar!
raquelinamor
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Venezuela/2016