Ania Marcheselli

La peor quemadura

La herida en el corazón,

La mirada al cielo,

Esperando tener razón

Al fingir consuelo.

 

Como una cortada

Que por no ser vista

No duele, no hace nada.

Ardor que no sana.

 

Como un niño quien no llora

Ignorante a su pena

Dulce salvación,

Pura condena.

 

Preparación de sonrisas

Con sabor a amargura,

Máscara perfecta,

Perfecta tortura.

 

Yo, ciega, cobarde,

Soy mi unico engaño.

Mentiras a mi misma,

De mis lágrimas el paño.

 

Palabras deslizándose

De entre tus labios

Transformaban mis latidos

En dolores varios.

 

Camuflaje sin valía

Quien mi boca dibujaba.

Solo lo desmentía

Mis frases rebuscadas.

 

Me pediste fuese honesta,

Por eso honestamente

No es que no me duela

Es que ya no se siente.

 

Como en mi piel, la peor quemadura

Arrullando a los nervios en muerte segura.