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Y con el corazón en el piso,
busco lo que tu alma aquí hizo,
un desastre de esos en el corazón,
que conlleva una esencia tu alma aquí,
que penetra en lo más hondo del pecho,
una flecha como cupido,
y en tu presencia decir que eres mi bien,
cuando decides albergar besos aquí en mi piel,
y querer amar más,
es querer entregar la cobardía,
hacia otro lado del abismo,
zucumbiendo a lo más profundo,
de una idea que me eleve hacia el firmamento,
entre una osadía y una virtud,
de tu propio instinto,
llegando a ser igual o menor,
que una huella perfecta de tus besos,
aquí sobre mi cuerpo,
buscando alterar que en cada esencia,
se torne más alta cada día,
buscando una salida,
me quedo sin mirar atrás,
porque tú, sólo tú,
me das la fuerza para seguir amando,
con la voluntad,
con la fría piel como un hielo,
atemorizada de temores,
porque simplemente, tú no estás más aquí,
y querer una verdad,
es amar la incertidumbre,
de un después,
que quizás,
se alterne como un suspiro,
de esos que calman la sed,
y dejan en tu ser más dolor,
sólo, dime por favor,
que delante de tu alma,
hay mas luz como si fuera un lucero,
voraz como la soledad que hoy atrapa,
a mi alma,
cuando por querer amarte,
me quedo solitario,
como una rosa marchita en el jardín de tu corazón,
y como si fuera poco,
como si yo me volviera loco,
me quedo sintiendo,
lo único que salva a este amor,
como si fuera clandestino,
e intranquilo como la noche fría,
que hoy dice actuar el corazón,
contra la falta de amor,
en el corazón si tú no me amas,
y querer por ti,
es querer dar el sueño lleno de realidades,
y ser el dueño de tu alma queriendo por quererte más...
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