J. C. R. Sandima

El tiempo pasado

¿El tiempo pasado?

es un templo del meditar,

y del pensar sin sentido estelar,

amigo y enemigo del hombre.

 

En los corceles del tiempo

la voz del que clama se quemó

y la voz del mar se encendió.

El tiempo pretérito se desvaneció,

como el viento que vino y se fue.

¿Qué relación hay entre

el tiempo y el espacio?

 

El tiempo es una flecha disparada

en razón de su movimiento cinético,

de donde vino y a donde va,

y no obstante, se mueven los planetas

en los rollos del tiempo.

 

El tiempo pasado es Señor Pretérito,

es un viejo amigo, arcano y enfermizo

jorobado de cabellera blanca

plagado de artritis malévolas,

reumático, desarticulado milenario

cubierto de heridas sectarias.

El vaivén de la sombras oscuras

de guerras y genocidios.

 

Es un Ente férreo, de capa bermeja

salpicado de sangre coagulada,

prenda tejida con urdimbres de odio,

tramas de venganza y antorcha humana,

cosida con hilos de la discordia.

 

El Tiempo pasado es un enjambre

de hojas secas que una vez era fronda,

es la fruta que no pudo madurar.

Es un árbol caído, seco y mudo,

sordo, ora que lejos no encontró,

\"siete vacas flacas y siete vacas gordas\"

templo fugaz de la fortuna, y el

rechinar de estómagos y lágrimas.

 

La historia pasada es una huella,

extraviada y difícil de hallar,

indigno de imitarla, sin embargo,

eso es lo que cada día se hace.

Conocer el tiempo pasado

es señal de ser rico.

El que no lee pobre es.

 

Leer la historia es como entrar

en un cementerio, donde están

los genios, los héroes y criminales,

donde no duermen sino que están

activos en los pergaminos.

 

El Tiempo pasado, es fuego apagado

que murió en las ascuas de la batalla.

Es la sangre derramada,

donde huele a cuero quemado.

 

Huyó de prisa sin despedirse

como el ladrón que se le sorprende,

los que la vieron embarrados

en la duda se quedaron.

 

El pretérito es un maestro experto

cuya herencia de sus bienes

los ha dejado a sus hijos bastardos,

los que ahora están cosechando

y junto a ellos, sus nietos llorando.

 

El Tiempo pasado es una anciana,

que de sus pechos, dio la leche

amarga a sus hijos ingratos.

El pretérito es un barco viejo

encallado en la costa de la esperanza,

donde piedras preciosas entornan

mas sus tripulantes no la ven.

 

Es una tormenta pasada,

una pesadilla de la media noche,

hablar de este es como visitar

un pueblo muerto, donde los chacales

aúllan y el búho, gime, la noche fría,

trono y corona del rey abandonado.

 

El tiempo pasado es un lago,

de agua amarga sin vida.

Es una herencia fallida,

de harapos y prendas viejas

de prejuicios, odio y de traición.

Quisiera quemar todos esos caprichos

en la Cacharpaya célebre. Adiós,

mi amigo del tiempo pasado.