Raquelinamor

ENCUENTRO INDIFERENTE

 

Te vieron estos mis ojos, demolidos por el llanto,
en silencio te acariciaron, paralizando mis manos,
los deseos de tocarte, en instantes se inmolaron,
sin un saludo aparente, dos palabras se cruzaron,
juntos de pie, cabellos canos, del tiempo tomados,
un encuentro indiferente, por motivos ya olvidados.

¡Por ti Hombre yo morí!, ¡varias veces por ti morí!
y también por ti, otras tantas veces más yo renací,
tan solo con la esperanza, de que volvieras a mí,
para quererme de nuevo, ¡sí! en ese tu amor viví,
merodeando entre los espejos, reflejos del sufrir.

Me hiciste daño, esposo y compañero de mi vida,
daño breve y eterno, ese daño que no tiene cura,
que es flor del invierno, viviendo con alma oscura,
el vernos frente a frente, es dolor en mi fe perdida,
teñida de los recuerdos y causante de mis locuras.

Pero... no tuviste la culpa, de no haberme amado,
¡la culpa la tuve yo! ciega, inconsciente, tolerante,
por haberme equivocado, y el corazón entregado,
por haber sido una necia, no creyéndote malvado,
y en tus engaños viles, años de juventud pasaron.

Pero ¡duele! ese amor amargo, dolor de soledades,
¡dolor extraño! removiendo el cajón hábitat del alma,
nacen razones injustas, e injustas mis tempestades,
dolor del alma, dolor causa de la traición sin calma,
y el sabor de haber amado, que nos dejó al fragor,
hijos, nietos, los frutos buenos, siempre anhelados.

Bullía la sangre en mis venas y se nublaba mi mente,
pasos se hicieron lentos al marcharte... ¡Mi condena!
pareciera la cruz del mundo, recostándome sus penas,
llevando carga de historias malas y buenas, existencias,
que una vez torpemente fracasaron y así sucumbieron.

Amaron sin ser amados, ¿felices o infelices? ¡humanos!
orgullosos, sembraron semillas de una familia plena,
de amores llena, de muchas victorias, y de bendiciones,
me llevará al próximo encuentro, ¡amor de mis amores!
dicen los latires del alma compungida y ciega de pasiones,
¿habrá perdones? ¿no más rencores y amargos sinsabores?
solo un adiós triste, la mirada, es huella de la despedida.

Raquelinamor
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001/16092015