ezequielmerlo

CARTA DEL NIÑO QUE FUI

Al pensar cuando éramos niños, pienso en todo el tiempo que ha pasado, tiempo en donde sólo nos importaba el juego, vivíamos para jugar y jugábamos para vivir, nuestro mundo era más pequeño, y dentro de esa
pequeñez se nos hacía inmenso. Recuerdo todas aquellas tardes donde jugábamos, reíamos, hacíamos cosas que sólo un niño podría hacer, nos hacíamos amigos con tan sólo preguntarlo. Nos queríamos con un amor puro,
porque nuestra inocencia estaba a flor de piel, también recuerdo nuestra vergüenza, esa que nos hacía escondernos o nos ruborizaba, ¿que tiempos aquellos no?...
Esos momentos a pesar de los años y la distancia jamás se borraron, el sentimiento se quedó y se hizo sentir. Momentos donde la alegría provenía de lo más simple o de alguna picardía.
Un alma de niño que salta de un lugar a otro por toda la casa y que ama el cansancio que provoca la diversión, así era mi alma...
Ahora somos niños que borraron su infancia y escribieron con lápicera y papel su madurez.
Sin embargo todavía el niño interior queda, todo aquello que marca nuestra esencia, no se borra, se impregna en nuestro ser.
Ya olvidamos el temor de los monstruos bajo la cama, ahora somos arropados por los recuerdos que nos unieron y las nostalgias que nos separaron.
Hoy somos cuerpos distintos, mentes que crecieron, pero sin embargo sueñan menos.
Mi niño como el tuyo esta dentro de este muro que construimos por el dolor de los años.
Aún lo escucho riendo por nada y siendo feliz por todo. Hoy me propongo a romper ese muro y mi niño se abre paso a lo desconocido, temeroso por lo extraño pero con valentía, por lo mismo que yo lo encerre, que
ironía..
Te pido que si te veo nuevamente y te sonrío, tu también lo hagas. Pero quiero que saques a esa criatura, esa que hace tanto sonreía, lo haga de la misma manera.
Encuentra lo que se que jamás has perdido, y lo que la gente ya no ve, ahora ve a un adulto, pero yo se que esa niñez que vive dentro de ti esta despierta, esperando que la invites a salir y a jugar...
¿Nos sentimos niños otra vez?