Y vi pasar las horas sentado en esa esquina 
Y te esperé
Te esperé hasta el cansancio con la mirada pérdida 
Te añoraba
Sonreía
No sé si me conocías
Pero me sentía tu dueño aunque tú no lo sabías 
Eres mía, fuiste mía, por siempre tú serás mía
Aunque te encuentres distante
Parada en aquella esquina 
Te sigo viendo de lejos con mi mirada pérdida 
Que se encuentra sin saberlo con la tuya conocida