kavanarudén

Alas de libertad

 

Dulce realidad que emana dentro.

Mi verdad, mi refugio, mi tesoro.

Por mucho tiempo fui mi verdugo.

Negándome el dono del existir intenso.

Muchos los temores, tantas las condenas.

La mano que debió ser mi sostén, fue mi tormento.

Tinieblas descendieron en mi tierno vivir,

opacando mi sereno mirar, dejando un halo de melancolía;

desmenuzado poco a poco mi inocencia.

Pronto comprendí que vivir era sobrevivir,

resistiendo este un gran engaño por luengos años.

Ansias escondidas, sueños prohibidos, encuentros furtivos,

amores abortados en el rincón del olvido.

Renací de mis cenizas. Descubrí el engaño, mi engaño.

En silencio y con dolor, crecieron mis alas.

Miré a lo lejos, la luz se expandía, comprendí la suerte mía.

Me tiré al vacío y, cuando menos lo esperaba, remonté el vuelo.

Un vuelo sereno llamado libertad.