Rafael Rec

DE MADRUGADA

 

Sin dormir la madrugada me sorprende

porque soy el vigilante de tu sueño,

y aunque lejos, tu recuerdo no desprende

la alegría de obsequiarte aun mi sueño.

 

Porque dando de lo poco que tenemos,

nuestra vida se transforma en sentimiento,

contrarresta de nuestra alma los venenos,

multiplica las sonrisas cien por ciento.

 

El insomnio no es inútil ni dañino,

porque invierto tantas horas escribiendo

mis sonetos que carecen de destino.

 

Sin embargo, poco importa porque aun durmiendo,

voy soñando que por fin nuestro camino

marcará a estos sonetos su destino.