naraPZ

VOZ

La boca de un joven y su lengua lisa

meditando con dulces melodías,

dictando los cantos que llenan de ti;

ansían, vierten y contienen

en el fulgor del deleite.

 

Solo la noche más la voz divina

cobijan con la emoción al espíritu

ensalzado por la magnífica lengua

y sus cuerdas de sonoridad sempiterna

recibida en mis orejas.

 

Susurros como caricias, voz como deleite;

emoción encarnada por el suspiro

de una voz alegre, vivaz.

Dale tu voz al viento

para que este acaricie

lo eterno, lo sublime.

 

No dejes de hablarme nunca

para que mi oído no descanse

al timbre de tu palabra

hecha vida en mis oídos.