Poeta sin alma

Honestamente

A nadie le muestro mis heridas

por temor a la crítica ajena,

porque no vale compartir la pena

donde no hay benéficas salidas.

 

Quizás mis penas sean aburridas

para los demás, el mar y la arena,

sin esperar su cruel condena

sus sentencias no son concluidas.

 

Me faltan buenos argumentos

para expresar lo trascendente

que es caminar en la podredumbre,

 

pues no soy de inventar cuentos

de forma deshonesta e imprudente

que me lleven a quemarme con lumbre.