nelida moni

Tibieza infinita

 

En ti y en mí,

se va recogiendo,

la tarde tranquila

de domingo

 

Suenan, no lejanas,

las campanas y en

nuestro horizonte,

se vislumbra el alba

 

Somos dos y

 nos perdemos

 no hay monte,

 ni montaña, nos

espera una llanura.

 

Parece un cuadro

de figuras, donde

el ocre y el verde

se fusionan...

 

Nadie ser percata

de este amor,

de la beldad y la

ternura

 

...La tarde

se ha dormido y es

la noche, el único

testigo