alejandro guardiola

TE TENDÍ LA MANO

Te tendí la mano como a un buen amigo

aquella tarde aciaga en que tu llorabas

quise entregarte mi alma, llevarte conmigo

más tu seguiste adelante, de mí te olvidabas

 

Te vi marchar llorando sin entender la razón

pues solo era tu amigo, más tenía un corazón

me penetró en el cuerpo una extraña sensación

al sentir que tus tus ojos me pedían perdón

 

Al día siguiente una esquela llevaba tu nombre

ese nombre sagrado que tanto adoraba yo

rompí a llorar a pesar de ser un hombre

al comprender que con tus ojos me decías adiós

 

Por culpa de un mal amor que no supo quererte

por aquel desalmado cruel que no supo entenderte

hoy yaces en la tumba olvidada en tu triste suerte

por culpa de un hombre cobarde que te llevó a la muerte