Sergio G. Maeso

DESPERTÉ DE SER NIÑO

Desperté de ser niño.

Nunca despiertes.

 

Desperté, al igual que tú,

de golpe, como despierta

el agua en la fuente.

 

Despierta de ser muerte.

Miguel, nunca te duermas.

 

Yo adulto, tú polvo,

caímos de la infancia

como caen las hojas muertas.