poetalibre

LA FOSA CIEGA

cuando el frío del necrópolis

abandone este mártir corazón 

que humillado reprocha contra mí,

daré sentencia a ese perdón que 

perdido y abceso supura en mi interior.

 

 

Cuando el acero de este amor muerto 

se funda escamado y duerma el dolor,

quemaré consciente a la endiablada ira

y morderé delirante los caminos 

que me tentaban a perder la razón. 

 

 

 Cuando la luz de mi alma lúcida 

y atrevida palpite resucitada por

los albores del entusiasmo, 

heroico yo heriré de muerte 

al insolente egoísmo que me ha perturbado.

 

 

Cuando el frenesí de la tristeza 

vuele al espacio fugado y mi alma

luzca brillantez en su propia oscuridad, 

venderé el busto de mi cuerpo 

a cualquiera que me brinde la felicidad. 

 

 

Pero.. Mientras peregrine fundida 

en desconsuelo esta puta ignorancia...

Mientras no me arrope delicada la madurez...

Lloraré en todas mis sonrisas y maldeciré

cada suspiro que no salga de mi ser.