victor febo

DESEAR LO DESEADO

 

Quien amar no sabe,

solo encuentra desamores.

 

Cerrando las distancias

se me antoja el alma distante

entre los poros del dilatado espacio,

que se ocultan tras la bruma sublime.

 

Brotando una sonrisa

que no abandona la levedad de tu aliento

sembrado con la escarcha de la inocencia...

 

Tañendo sobre un suspiro dormido,

casi ausente,

de ese perfume que evoca

el aliento del olvido.

 

Otro encuentro entre las manos

en un soplo de silencio,

para disipar el deseo de desear lo deseado

que se escapa del corazón furtivo.

 

Latiendo entre golpes de ausencia,

para retener el inefable deseo,

posado en la ingravidez

del dulce aliento de tu pecho,

que se escapa de tu boca.

 

Con ese sabor del desvelo

que acuna los espacios vanos,

y aligera los límites indecisos

del universo de la esencia.

 

Y se insinúa, apenas mensurable,

en un espacio colmado de sentimientos,

que resiste la pulsación sin detenerse,

para perderse en cualquier parte.

 

Y se enardece en los reflejos del azar,

para diluirse en un sentir

de insonora pasión anudada.