Sábado, 6 de Septiembre del 2015 a las 12:38 AM.
Piecitos descalzos ávidos de calor;
piecitos húmedos en busca de amor,
recorren caminos entre lluvia y frio.
¿Dónde se encuentran seres piadosos
que cubran aquellos piecitos terrosos?
***
Niños del mundo, os cubriré y daré calor
a vuestros delicados pies, con amor.
Secaré con mi fuego, húmeda noche
y el llanto de lluvia que cae con reproche.
***
¿Almas andantes entre dura indiferencia,
no os fijáis el dolor ajeno desde su estancia,
sois gotas de tiempo, caminando el mundo?
El ciego camina con ojos abiertos, en mar profundo.
***
Seré esa alma para curar la indiferencia
de aquellos que no ven su conciencia,
y sentiré el dolor de vuestros pies sangrantes
que hieren, que lastiman a los pensantes.
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Angelitos de carne y hueso, sus corazones laten,
suspiran lloran con razón, en mundo que baten
sueños que circulan como nubes, entrelazadas
de esperanza, alegría, y a sus corazones abrazadas.
***
¿Dónde queda la luz del alma humana?
Si sus piecitos llenos de ampollas emanan
la infelicidad, tristeza y llanto sin amor
Miradas sin luz se reflejan con desamor.
***
Os regalo mi compasión al niño descalzo,
les sonrió dulcemente y sus pies de calor calzo
con sentimiento puro que provocan dos piecitos,
dos preseas que seguirán nuestro camino, invictos.
¡Únete a labrar un camino sin espinas ni abismos!
***
¡ÚNETE A LABRAR UN CAMINO SIN ESPINAS!
Autora:
Rosa Elizabeth Chacón León/Stevens
* Contumazá, Perú/USA.